miércoles, 13 de octubre de 2010

más allá de todo, era

Nueva entrega semanal de un cadáver exquisito (producción colectiva) que, como la existencia, es un entramado de hilos varios, invitándonos a "barrer las veredas de la oquedad".
Gracias a quienes van sumándose.

Tráfico de venenitos

Un cartel en la parada del 152 dice “se busca traficante”, y una foto mía…
El espejo me demostraba que existía. Prueba fidedigna de que, más allá de todo, era.
No era una idea, ni una abstracción, ni un sueño.
Allí estaba. Yo, mi cámara, mi collar, mi pelo.
Mi yo – triste o feliz. Mi yo jactado de ser (yo). Y vos jactándote de no ser yo.
¿A dónde te vas? ¿A dónde nos trajeron? ¿Qué es esto?
¡Basta ya! ¡Aléjense de mí! Opacan mi creatividad reprimiendo mi verdad.
Barrí las veredas de la oquedad porque siempre queda la esperanza de volver a seguir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario